diumenge, de setembre 11, 2005

Grauer Himmel

Han pasado tres semanas y tengo la sensación de no haber aprovechado el tiempo.
Primero Valencia, demasiado cobarde para ir a Russafa me refugio en Benimaclet. Termino en el turmix. Eso si un martes por la noche. Lugar prohibido de jueves a domingo, pero el martes fue mio. Suerte de A que se junto, lastima de Claire. Contesto mas tarde diciendome que no seria buena idea el cafe, no se lo reprocho, tal vez haya sido la mejor idea quedarnos con nuestros posts.

Viaje a Rumania lo unico provechoso. Desconectar, desconectar, desconectar, descanectar, conseguido? Al menos es la sensación que tengo y la verdad que los carpatos y la meseta transilvana con sus costumbres ancestrales libres de supersticion ayudan. No solo otro pais, sino tambien otro tiempo. Otra forma de ver la vida y de tomarsela. Eso ayudo al mltrago en forma de cinco SMS del martes anterior. Llamada directa de reproche que solo sirvió que empezara el viaje de malas maenras. Por suerte la montaña ayuda dejar todo atras. a 2500 metros solo se llega con los pulmones medio llenos y un puñado de piedras en los bolsillos. Los ojos se llenan de lágrimas por el viento gélido de la montaña y la piel de la cara se resiente. Por suerte despues llega la fortaleza del exito, la que no deja, que por el hielo de la montaña se nos hiele el corazón.

Vuelvo a Berlin y me espera un dia gris. Asi va a ser mi otoño. Lo sé. Tengo que tomar muchas decisiones y no creo que sea capaz de ello. Nunca se me ha dado bien. Espero hacerlo lo mejor posible. Ahora no es el momento de pensar, tengo el otoño por delante. Me pongo a Maria del Mar Bonet, Amic Amat. Me emociono, hacia tiempo que mi madre no me regalaba ningun CD.